Todos queremos beber un agua totalmente pura, que no contenga ningún compuesto o elemento nocivo para la salud. Pero ¿realmente es sano optar por un agua sin sales ni minerales? La dureza del agua es algo con lo que en algunas regiones tienen que lidiar. Si bien los minerales del agua no son perjudiciales para la salud, el sabor de este vital líquido sí que se altera.
Se podría contemplar la opción de comprar agua embotella, pero hay que tener en cuenta que España está dentro del ranking de los 5 países europeos y 10 a nivel mundial en donde más agua embotellada se ingiere. En promedio, se beben más de 120 litros por persona y año. Esto representa dos grandes problemas, uno de ellos es ambiental, por la gran cantidad de plástico generado. El otro es de salud, porque hemos generado tal volumen de plástico que ahora conforma el llamado microplástico y nanoplástico, que incluso ingerimos. Pero hay un tercer problema y es económico: por lo que cuesta un litro de agua embotellada podríamos pagar más de 1.300 litros de agua del grifo.
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¿Cuántos minerales hay en el agua del grifo en España?
De acuerdo con un estudio del Ministerio de Sanidad, el agua proveniente del grifo contiene calcio, sodio, magnesio, bicarbonato y otros compuestos. Desglosando sus datos, se trata de 52,79 mg/L de calcio, 44,08 mg/L de sodio, 17,72 mg/L de magnesio, 159,31 mg/L de bicarbonato y 324,83 mg/L de residuo seco. Ahora bien ¿son dañinos estos elementos al ingerirlos mediante el agua del grifo?
Como casi todo en la vida, todo exceso es negativo. Si el agua contiene más de 150 mg/L, es adecuado para personas con problemas óseos. Con el sodio hay un poco más de problema, porque se le relaciona con la retención de líquidos. El agua, entonces, debe tener menos de 20 mg/L. En cuanto al magnesio, ayuda a la remineralización de huesos y dientes, riñones y equilibrio del pH. La cantidad presente en el agua debe ser mayor a 50 mg/L. Si bien el bicarbonato en exceso puede producir cálculos renales, el agua con cantidades por arriba de 600 mg/L es excelente para el sistema digestivo.
Finalmente, en cuanto a residuo seco, este término no es del todo negativo. Se refiere a aquello que queda después de evaporar el agua, que suelen ser sales minerales. El valor no debe rebasar los 50 mg/L para considerarse como “mineralización débil”, que es para personas con problemas renales.
Agua purificada con la cantidad adecuada de minerales
Realmente son raras las marcas comerciales de agua embotellada que cumplen con todos los estándares antes mencionados. Como hemos visto, los minerales del agua, dentro de límites adecuados, pueden ser altamente beneficiosos. Sin embargo, está la cuestión del sabor del agua, de su pureza y mineralización adecuada (además del tema económico y ambiental). Es por eso que en Aquaidam te ofrecemos la solución perfecta, agua purificada y con la cantidad perfecta de minerales.
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